Opuestos o complementarios?

Según algunos estudiosos, interpretadores y, lo que más me interesa, según yo: la luz es vida, es información, es ruido... En tal caso y por obvia oposición,  la oscuridad es es muerte, es silencio, ¿es angustia?.

La luz es actividad y la oscuridad descanso.

Ahora bien, puede pensarse que es mas facil andar por la luz que entre tinieblas, pero eso depende de qué le de mas miedo a una (sí, en femenino, porque claramente estoy hablando de mi).

Esto va de la mano con la idea (o de lo que quiero convencerme) que transitar la propia oscuridad es un virtud.

O quizás...  (¡Que dilema!) una pueda esconderse en una por miedo a transitar por la otra. Sea esto o aquello, estoy categóricamente convencida que hay que poder andar por ambas en la medida y proporción que se quiera o que se pueda, dependiendo del momento y las circuhnstancias.

No estoy diciendo que sea fácil. Para mi es claro que no lo es.

Y digo, es mas comun caminar por la luz con encandilamiento cegador que dilatar las pupilas para ver en las sombras.  Esto es una manera de metaforizar el dehacer y deber social frente a los que nos cuesta mirar para adentro y ver quienes somos y que queremos... porque despues hay que prender la lamparita y
bancar la parada!

¿seré fotofóbica?

Quizas uno irradie luz cuando mantiene su oscuridad para uno.

Yo no puedo dibujar ni un trazo o poner un color cuando estoy contenta. Sin una dosis de tristeza, angustia o melancolía no hay ni pizca de necesidad creativa.
En mi caso, y a riesgo de parecer suicida, la luz me la luz me cansa y la oscuridad me descansa.

Por el momento, y luego de todo este desvarío con poca coherencia semántica,  mi conclusión no humilde (porque para mi es un logro) es que el desafio mas grande es encontrar una escala de grises propia.

Aunque suene incoherente, mi respuesta al título de esta entra entrada es: ambos. OPUESTOS Y COMPLEMENTARIOS